Se trata de un desafío presentado y aprobado en el marco del programa nacional “ImpaCT.AR Ciencia y Tecnología”, en el que se promueven y financian proyectos de investigación y desarrollo que busquen soluciones a problemas de interés público. El Instituto Chaqueño de Ciencia, Tecnología e Innovación (ICCTI) tuvo un rol clave para detectar la necesidad, formular el proyecto y encontrar grupos de investigación que puedan trabajar con la temática.
“ImpaCT.AR Ciencia y Tecnología” es un programa que lleva adelante la Secretaría de Articulación Científico Tecnológica dependiente del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación. Tiene como propósito promover proyectos de investigación y desarrollo destinados a brindar apoyo a organismos públicos en la búsqueda de soluciones a desafíos de interés público, que requieran del conocimiento científico o el desarrollo tecnológico para alcanzar su resolución y así un efecto positivo en la sociedad.
Esta iniciativa busca fortalecer el impacto de la ciencia, tecnología e innovación en la construcción y aplicación de políticas públicas. “Como autoridad de aplicación de las políticas nacionales de ciencia, tecnología e innovación en el Chaco, desde el ICCTI trabajamos en colaboración con diversas instituciones públicas y privadas”, destacó Sergio Lapertosa, responsable del Área de Coordinación del ICCTI. A la vez que agregó: “Nuestro objetivo es identificar y aplicar soluciones basadas en conocimientos científicos y tecnológicos para resolver problemas, para ello nos enfocamos en el acceso a instrumentos de financiamiento y asistencia técnica que puedan facilitar la implementación de estas soluciones”.
“El ICCTI viene trabajando desde la apertura de este programa, coordinando con distintas entidades públicas de la Provincia del Chaco y acompañando en la presentación de varios desafíos que fueron aprobados”, remarcó Erika Bentz, responsable del Área de Recursos Humanos Altamente Calificados del ICCTI. También, contó que el instituto se compromete con la búsqueda de soluciones a dichos desafíos actuando como nexo entre grupos de investigación locales y del resto del país para que puedan trabajar en conjunto en la presentación de posibles soluciones.
Este año se presentó y aprobó el desafío denominado “Medición de humedad de suelo in situ y en tiempo real en territorio Chaqueño para la mitigación de desastres agrícolas, ganaderos y ambientales por fenómenos climáticos”. El mismo fue presentado por el Centro de Documentación e Información (CEDEI), de la Subsecretaría de Agricultura dependiente del Ministerio de Producción, Industria y Empleo. El proyecto plantea la hipótesis de que contar con mapas de humedad del suelo, favorecerá la mitigación de desastres en el ámbito agrícola, ganadero y del ambiente; además de proporcionar indicadores que permitan tomar decisiones para la planificación agrícola.
El Chaco se encuentra en una región donde las características del clima tienen una alta variabilidad, sobre todo las relacionadas con pluviometría, por lo que cada año se presentan períodos de excesos y déficit hídrico que afectan la producción agrícola, ganadera y la vida en general de los habitantes de la provincia. El monitoreo de las condiciones meteorológicas es un instrumento para el diseño de políticas públicas que contribuyan a mitigar el impacto de la variación del clima en la producción agrícola de la provincia.
La propuesta presentada establece crear una red de monitoreo de humedad de suelo, distribuida a lo largo de la provincia cuyo procesamiento permita informar a tomadores de decisión y agricultores el estado hidrológico del suelo; disminuyendo así los efectos adversos de desastres agrícolas, ganaderos y ambientales por fenómenos climáticos.
“La red sinóptica (estaciones automáticas agrometeorológicas) del Ministerio de Producción, Industria y Empleo se verá fortalecida con la puesta en operación de sensores específicos de humedad suelo”, indicó Hector Daniel Benitez, director del Centro de Documentación e Información del Chaco. Además, aclaró que esto permitirá a la provincia avanzar en la obtención y procesamiento de información para el monitoreo de las sequías.
Desafíos anteriores del ImpaCT.AR
El primer desafío aprobado en el 2022 por el programa “ImpaCT.AR” en el Chaco fue presentado por el Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de la provincia y se denominó “Tecnología aplicada a la remoción de Arsénico en agua de escuelas rurales de los departamentos Almirante Brown y General Güemes de la provincia del Chaco”. La falta de acceso al agua potable es un problema que afecta a gran parte del territorio argentino y en particular en nuestra provincia. Por ello, a través de esta propuesta se buscaba brindar soluciones para acceso a agua segura de los establecimientos escolares de los departamentos Almirante Brown y General Güemes.
El desafío fue impulsado por el ICCTI, quien encontró una posible solución de la mano de científicos de la Facultad de Ingeniería de la UNNE y INQUISUR, Departamento de Química, Universidad Nacional del Sur (UNS-CONICET). Investigadores de la UNNE y la UNS trabajan actualmente en el desarrollo de un sistema de remediación de agua contaminada con arsénico, para instalar en escuelas rurales de Chaco. Se trata de un equipo de bajo costo, sencillo de operar y fácil de escalar, pensado para que pueda ser replicado fácilmente en otras instituciones con la misma problemática.
El segundo desafío impulsado por el ICCTI fue presentado por el equipo de Innovación del Departamento de Gestión de Proyectos Especiales de SAMEEP y se denomina “Propuesta para el manejo sustentable de lodos generados en PLTC-SAMEEP”. La iniciativa de resolución a este desafío es crear una planta de compostaje para la acumulación de los lodos provenientes de la planta, previniendo la contaminación a los suelos y aguas subterráneas. De esta manera se generaría un recurso saneador para los suelos de bajo contenido de materia orgánica.
La posible solución a este desafío fue presentada por investigadores del Instituto de Investigaciones en Tecnologías Energéticas y Materiales Avanzados (Universidad Nacional de Río Cuarto-CONICET), quienes consiguieron financiamiento para llevar adelante la propuesta.